La Reggia di Caserta, el Versalles italiano, el palacio barroco que el rey Carlos III encargó al arquitecto Luigi Vanvitelli como símbolo del poderío del reino de Nápoles, acaba de abrir sus puertas por primera vez en su historia a una colección privada. El honor de exponer en sus salones ha recaído en el anticuario romano Cesare Lampronti cuya pinacoteca de maestros de los siglos XVII y XVIII, que ronda el centenar de piezas, dialoga con las obras que adornan las ricas estancias del palacio napolitano. Tercera generación de una conocida dinastía de anticuarios, la Galleria Lampronti fue fundada en 1914, en Roma, por su abuelo Cesare, cuya especialidad eran pintores como Caravaggio, Canaletto y sus seguidores. Tras la prematura muerte de su padre Giulio, Cesare Lampronti se hizo cargo del negocio familiar imprimiéndole un nuevo giro que le llevó a participar en las principales ferias internacionales como TEFAF, la Biennale de París, Frieze Masters o Paris Tableau. Vanessa García-Osuna
