“Sigo sintiendo curiosidad, me siguen interesando los cuadros. Cuando estoy en el taller me siento como si tuviera 30 años, pero cuando salgo de él, de repente, tomo conciencia de que soy un octogenario. Así que, naturalmente, prefiero estar en el estudio. ¿No lo haría usted también?” le preguntó David Hockney a un periodista durante la presentación de la exposición dedicada a sus dibujos (David Hockney: Drawing from Life) en la National Portrait Gallery de Londres, que en otoño se presentará en la Morgan Library de Nueva York. La muestra se argumenta con 150 dibujos íntimos que recorren su carrera, desde la década de 1950 hasta el presente, poniendo el foco en los que el artista ha hecho de sí mismo y de un pequeño grupo de allegados: su musa, Celia Birtwell; su madre, Laura Hockney; su ex pareja Gregory Evans, y el impresor Maurice Payne. [Autorretrato con tirante rojos, 2003 © David Hockney. Foto: Richard Schmidt]
