Los Brueghel fueron una de las dinastías artísticas más conocidas del norte de Europa. Fue Pieter Brueghel el Viejo quien nos brindó, a través de sus pinturas, la primera visión de la vida campesina en el siglo XVI, de ahí que pronto se ganara el apodo de ‘Brueghel el campesino’. Su hijo Pieter Brueghel el Joven tenía sólo cinco años cuando su padre murió, trasladándose entonces la familia a Amberes donde Pieter abrió un estudio, que produjo copias de alta calidad, así como composiciones originales emulando las pinturas de su progenitor. Regentó un taller prolífico que empleó hasta nueve discípulos, entre ellos Frans Snyders y Andries Daniels. El rey bebe, sale hoy a pujas en Dorotheum preciado entre 700.000 y 900.000 euros, y recrea el momento en el que el monarca alzaba su copa para dar el primer sorbo y la compañía gritaba «¡El rey bebe!», dando comienzo a las celebraciones.
