María Eugenia de Beer fue un caso atípico en la Corte española. Activa entre 1640 y 1652, fue la única grabadora de la que se tiene constancia en estas décadas en Madrid. Fue hija de Cornelio de Beer y se casó con el también flamenco Nicolás Merstraten, que sería Ayuda de Cámara y bibliotecario de Juan José de Austria. Aunque se desconocen muchos aspectos sobre su vida –no se tiene constancia de la fecha exacta de su nacimiento, ni de la de su fallecimiento ni de los motivos por los que cesa en su actividad-, la mayor parte de su producción fueron portadas de libros y de retratos, los dos géneros fundamentales del grabado barroco español. Esta muestra vuelve a poner en primera línea a esta figura cuya obra se conserva casi en su totalidad en la Biblioteca Nacional.
