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    La sensacional colección de Beth Rudin DeWoody

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    Hija del conocido magnate de bienes raíces Lewis Rudin, Beth Rudin DeWoody (simplemente “Beth” en el mundillo del arte), atribuye su sensibilidad por el arte a la educación liberal que recibió de niña en la Rudolf Steiner School de Manhattan. También reconoce otra influencia decisiva: la exposición Pintura y Escultura: 1940-1970 celebrada en 1969 en el Metropolitan de Nueva York (la primera exhibición de arte contemporáneo de la institución, comisariada por Henry Geldzahler). «Aquella muestra despertó mi amor por el arte contemporáneo» ha asegurado. Tras culminar sus estudios en la Universidad de California, donde se especializó en antropología y cine, DeWoody trabajó durante un tiempo como asistente de producción en películas como Hair y Annie Hall. Su faceta como coleccionista se inició en la década de los 60, cuando empezó a reunir recuerdos y memorabilia. «Siempre he tenido un acusado sentido de la historia, y consideré que algunas cosas podrían ser importantes para las generaciones futuras.» Su matrimonio con el artista James DeWoody le permitió integrarse en los círculos artísticos y empezar a comprar obras de colegas y amigos. Hoy su excepcional colección ofrece una insólita combinación de rutilantes promesas y firmas consagradas. «Muchas veces descubro artistas jóvenes varios años antes de que entren en el radar de los museos» -dice orgullosa- «muchos coleccionistas suelen esperar hasta que un artista se hace un poco famoso antes de comprarles nada. Sin embargo, yo pienso que es importante ayudar a los jóvenes. Incluso si cuando la pieza llega a tu casa y te preguntas ‘¿por qué habré comprado eso?’ Bueno, se compra para apoyar al artista». DeWoody se describe a si misma como una coleccionista “poco académica y muy espontánea. Sólo compro lo que me gusta», mientras que Adam D. Weinberg, director del Museo Whitney de Nueva York, la define como una mujer “con un ojo clínico, una curiosidad sin límites y un abanico de intereses asombroso.”

    La envergadura de su colección corta el aliento: más de 10.000 obras –pinturas, esculturas, dibujos, fotografías y videos- que reparte entre sus residencias de Nueva York, Southampton, West Palm Beach y los Angeles. En la nómina de artistas representados figuran desde Reginald Marsh, Jamie Wyeth, Sol LeWitt, Cy Twombly y David Smith a Isamu Noguchi, Jim Lambie, Lee Bul, Matt Johnson o Roxy Paine. “Es una mezcla de jóvenes y viejos” dice sobre el conjunto. Nuestra revista tuvo la oportunidad de conversar con esta reputada coleccionista con motivo de la exposición El triunfo del amor, organizada por el Museo Norton de Florida, y argumentada con una selección de 200 obras de su colección particular. En la actualidad Beth Rudin, casada con el fotógrafo de celebridades Firuz Zahedi, es la vicepresidenta de la compañía Rudin Management, preside las tres fundaciones familiares, además de ser miembro de los patronatos del Museo Whitney y la Academia de Música de Brooklyn.

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