Este soberbio jarrón de porcelana azul y blanca en forma de ánfora, de la época de Yongzheng, con casi 300 años de antigüedad y 54 cm de altura, podría venderse mañana por más de un millón de euros en la sede londinense de Christie’s. Este tipo de piezas exigían una destreza excepcional para su fabricación. El momento crítico era la cocción al tratarse de un objeto muy pesado. Se solía elaborar en diferentes partes que se ensamblaban posteriormente antes de introducirlas en el horno, instante en el que no era raro que muchas vasijas se desplomaran debido al peso de su parte superior. Este jarrón luce un diseño floral y cada flor tiene un significado simbólico que alude a una estación o una cualidad personal del esteta y erudito emperador Yongzheng. El periodo Yongzheng duró apenas una década, pero algunas de las porcelanas chinas más finas y delicadas se crearon en esta época gracias al patrocinio de la corte imperial.
