“Yo soy Ciro, rey del universo, el gran rey, el rey poderoso, rey de Babilonia, rey de Sumer y Acad, rey de los cuatro extremos de la tierra…” estas palabras registradas en una tablilla cilíndrica conmemoran la conquista de Babilonia por Persia que, tras la llegada de Ciro el Grande al poder en el 559 a.C., amplió sus dominios hasta convertirse en la primera gran potencia del mundo antiguo. Aunque sus logros artísticos no palidecen ante los de las regiones vecinas como Mesopotamia y Egipto, los avatares políticos han ensombrecido el brillo de esta nación, en la que vino al mundo Ina Sarikhani Sandmann, quien llegó a Reino Unido con su familia huyendo de la Revolución Islámica de 1979. Tal vez como manera de mitigar la nostalgia, así como de mostrar el orgullo por sus raíces, Ina y su padre, el financiero Ali Sarikhani, empezaron a coleccionar obras de arte de su país natal. Sus fondos, que superan el millar de piezas, recorren cinco mil años de historia y nos llevan desde los antiguos palacios de Persépolis a la opulencia de la corte safávida, además de tomar el pulso a la vibrante creación contemporánea. Comprometidos con la difusión del legado persa, su último proyecto es la exposición Epic Iran en el museo Victoria & Albert de Londres, para la que han prestado valiosas piezas, y de la que Ina Sarikhani ha sido comisaria asociada. La historia de Irán es relatada a través de objetos como el Cilindro de Ciro y los manuscritos del Shahnameh, el libro de los reyes, pasando por obras de algunos de sus artistas actuales más aclamados como Shirin Neshat o Farhad Moshiri. Sarikhani pretende que quienes visiten la muestra no solo conozcan mejor su país sino que “acaben conociéndose mejor a sí mismos.” [Vanessa García-Osuna. Foto: Jasper Fry]