“Queremos ofrecer una experiencia cercana y exclusiva con el arte moderno como protagonista”, afirma Jorge Alcolea, promotor de SAM-Salón de Arte Moderno, que cita en la Fundación Carlos de Amberes de Madrid a una quincena de galerías que mostrarán piezas representativas de las vanguardias históricas y la escena actual. También habrá espacios monográficos dedicados a creadores como Jaume Plensa, Rafael Canogar o el ilustrador Fernando Vicente. “Tenemos unas previsiones de público de más de 10.000 personas y una inversión de 3 millones de euros por parte de los coleccionistas”, apunta ilusionado Alcolea. El director del certamen, el galerista Jorge Alcolea, ha reservado para la cita dos piezas destacadas de un icono del surrealismo, Salvador Dalí. Una de ellas es Mauvaise Année [en imagen]un pequeño gouache realizado en los años 30, que contiene algunos de los elementos más recurrentes del artista de Figueres que además pueden ser interpretados bajo la óptica freudiana: la cabeza del león alude a los deseos salvajes y terroríficos, mientras que las fauces abiertas simbolizan el sexo de la mujer con el consiguiente miedo a ser devorado. Desde la lectura de La interpretación delos sueños, Dalí fue un freudiano acérrimo y conocería al padre del psicoanálisis en el verano de 1938, después de varios viajes a Viena infructuosos. Además, Alcolea exhibirá otra creación del maestro catalán: una escenografía de unos diez metros de altura que el surrealista concibió para la compañía de los Ballets Rusos de Montecarlo.
