Maribel Verdú (Madrid, 1970) ha crecido ante nuestros ojos. Debutó en el cine con apenas 14 años en un episodio de la serie televisiva La huella del crimen, y dio el golpe de efecto definitivo con su papel en Amantes de Vicente Aranda. A partir de entonces ha trabajado con lo más granado del séptimo arte español: Fernando Trueba, José Luis Garci, Bigas Luna, Carlos Saura y Gonzalo Suárez, entre otros. También puede presumir de haber rodado a las órdenes de leyendas como Francis Ford Coppola y oscarizados cineastas como Guillermo del Toro quien la escogió para su filme El laberinto del fauno, un papel que le abriría las puertas de la Academia de Hollywood. Su última incursión en el cine es un trepidante thriller ambientado en el mundo del arte en el que da vida a una inspectora con la misión de resolver una serie de asesinatos en los que su autor ha emulado las escenas de los caprichos de Goya. En esta entrevista, Verdú demuestra que también es una gran aficionada al arte y habla de su especial conexión con la pintura de Hopper, de su fascinación por las mujeres de Modigliani o del impacto que supuso su encuentro con la fotografía de Helmut Newton. [Foto: Rubén Vega]. Raquel García-Osuna
