Algunas de las figuras más brillantes del arte catalán del siglo XX iluminan la subasta que Lamas Bolaño celebra el 15 de junio en su sede de la calle Rosselló. Considerado el gran pintor del Modernisme, Ramon Casas (Barcelona, 1866-1932) nació en el seno de una familia acaudalada. Su padre hizo fortuna en Cuba y su madre era una adinerada industrial textil. Casas se convirtió en el retratista oficial de la sociedad de su época: intelectuales, artistas y grandes personalidades posaron para él. Un ejemplo de esta celebrada vertiente es el retrato del actor catalán Enric Borràs, realizado a carboncillo y pastel en octubre de 1903, que busca comprador valorado en 7.000 euros.
La carrera internacional de Hermenegildo Anglada Camarasa (Barcelona, 1872-Pollença, 1959) fue fulgurante y pudo enorgullecerse de haber triunfado en el París de la Belle Époque. Uno de los lotes más interesantes de la sesión pertenece a este artista cosmopolita; se trata de un paisaje con río pintado sobre su propia paleta. Fechado en 1897, está reproducido en el libro Anglada-Camarasa, de Francesc Fontbona y Francesc Miralles, y sale a pujas en 9.000 euros.
Nacida en Georgia, Olga Sacharoff (Tiflis, 1881 – Barcelona, 1967) se trasladó pronto a París, al barrio de Montparnasse, donde expuso en los principales salones de la vanguardia. Huyendo de la Primera Guerra Mundial recaló en la localidad gerundense de Tossa de Mar que promovió como lugar de encuentro de muchos artistas de vanguardia. Se instaló definitivamente en Barcelona en 1940, en el barrio del Putxet, participando activamente en la vida cultural de la capital catalana. Uno de sus alegres paisajes sale a pujas valorado en 4.500 euros.
Con una estimación de 10.000 euros, se ofrece el dibujo con ceras de colores con el que Joan Miró (Barcelona, 1893-1983) adornó las páginas del catálogo de su exposición en la Sala Gaspar, la Galería René Metras y Belarte. Está firmado y dedicado en diciembre de 1964.
La sesión de arte antiguo está liderada por Minerva protege a Pax de Marte, óleo de un seguidor de Rubens activo a finales del siglo XVII, tasado en 9.000 euros. Se basa en la obra también conocida como Paz y Guerra del maestro flamenco conservada en la National Gallery de Londres. Rubens pintó su cuadro en Londres durante una misión diplomática de paz en nombre del reino de España y se lo regaló al monarca Carlos I. La escena plasma a Minerva, diosa de la sabiduría y de las artes, en el acto de alejar a Marte, dios de la guerra, mientras delante de ellos está la figura desnuda de Pax.
Igualmente destacable es una Virgen de la Leche creada a finales del siglo XVI por un seguidor de Gerard David. Esta bella tabla, preciada en 7.000 euros, es un ejemplo de la dulzura y el preciosismo que definió la pintura flamenca del siglo XVI.
También conviene prestar atención a un San José con Niño, del círculo de Murillo. Este óleo sobre tela de la Escuela andaluza del siglo XVII acepta pujas a partir de 4.000 euros.
Los amantes de la escultura antigua tienen dos interesantes opciones. De la escuela alemana del siglo XV se licita un San Sebastián en madera tallada y policromada, valorado en 5.000 euros. El santo es representado cubierto sólo con un reducido paño, está atado a un árbol y su cuerpo aparece plagado de las heridas provocadas por las flechas. Es una obra bien ejecutada, con uno de los brazos dirigidos hacia arriba y el otro hacia abajo a la altura de la cintura. El rostro, de facciones correctas, no refleja el dolor. De la Escuela de Malinas del siglo XVI se propone una Virgen con Niño, en madera tallada y policromada, que sale en 3.500 euros.
El capítulo de las artes decorativas depara agradables sorpresas como un elegante reloj de sobremesa francés Napoleón III con pareja de candelabros de cinco luces en bronce dorado y porcelana con decoración floral, paisajística y escena galante. Realizado a finales del siglo XIX, se ha tasado en 2.000 euros. Y también es hay que resaltar un conjunto de seis hacheros en plata española punzonada Marquina-Espuñes, Madrid Villa y Corte, 1864. Con un peso superior a 9 kg, su precio de salida es de 4.000 euros.
Por último, las joyas siempre tienen un protagonismo especial en las ventas de Lamas Bolaño y en esta ocasión las miradas recaerán sobre un juego de gargantilla, pendientes largos y broche isabelino en oro mate y brillo con medallones de motivos florales y vegetales (con estuche original) valorado en 3.500 euros; así como una pulsera brazalete en oro mate y brillo compuesta por cinco placas articuladas decoradas con motivos vegetales en bajorrelieve, esmalte, topacios, diamantes y esmeraldas, por el que se piden 2.000 euros.
