En la memoria de José María Cruz Novillo (Motilla del Palancar, Cuenca, 1936) hay una fecha indeleble: la del 9 de noviembre de 1958 cuando recién llegado a la capital desde su pueblo manchego es aceptado como dibujante en una importante agencia de publicidad. Aquel día comenzaría una trayectoria pionera que medio siglo después la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, distinguiría entregándole su medalla número 54. El motivo: su aportación a las Nuevas Artes de la Imagen. Y es que Cruz Novillo, “el hombre que diseñó España” como dice el título de un documental sobre su figura, ha sido uno de los grandes artífices de la transformación de la identidad visual de nuestro país. A su ingenio deben un sinfín de logos corporativos como los del Renfe, Correos o la Policía Nacional, pero también el diseño de billetes para el Banco de España y algunos de los carteles más icónicos de cineastas como Carlos Saura, Elías Querejeta o Luis García Berlanga. Y eso sin descuidar su producción artística siempre a la vanguardia. “Me considero un escultor posdadaísta que trabaja con todas las materias, incluidos los sonidos. Para mí son la misma cosa que los colores, las texturas, las tecnologías, las palabras y los números, la luz, las fotografías…” explica. Ese espíritu joven y curioso es el mismo que, a sus 85 años, le hace seguir yendo al estudio, que dirige con su hijo Pepe Cruz, para tratar de desentrañar lo que Pessoa llamó “el misterio de las cosas”. [Vanessa García-Osuna. Foto: Erea Azurmendi]
