“Aún aprendo”, confesaba Goya en uno de sus últimos y más conmovedores dibujos. En la estela del maestro de Fuendetodos, Luis Gordillo demuestra a sus 89 años un sorprendente nervio creativo y una curiosidad por asumir nuevos retos, sin conformarse o copiarse a sí mismo. Premio Nacional de Artes Plásticas en 1981, Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes en 1996 o el Premio Velázquez en 2007 son algunos de los honores que han jalonado su carrera. El artista presenta en la Sala Alcalá 31 de la Comunidad de Madrid dime quién eres Yo, una exposición que reúne las obras que ha creado en los últimos 20 años. Comisariada por Bea Espejo, esta retrospectiva enlaza con la muestra que el Reina Sofía le dedicó en 2007. Para ello, dime quién eres Yo arranca con la pieza que cerraba aquella muestra para adentrarse después en el corpus artístico que ha configurado desde entonces. “Mi obra ha ido creciendo. En los 80 tuvo un momento de consagración y de maduración y ese proceso de cambio no ha parado nunca. No soy un artista que se acomoda en una manera de trabajar y se dedica a copiarse a sí mismo. Supone un gran esfuerzo cada día porque la pintura, si se toma en serio, es un trabajo muy duro. Con esta exposición mi obra está terminando”, apunta. El pintor nos descubre en nuestra edición de noviembre los secretos del cuadro más grande que ha hecho nunca, un monumental mural autobiográfico [272 x 900 cm], cuyo proceso de creación compara irónicamente con el de “hacer un portaaviones”. “Esta obra es especial por la referencia a lo autobiográfico -explica- Hice una anterior que se expuso en mi última muestra en Marlborough que se llamaba Autobiografía gordillensis del año 2020 y que ya señalaba un poco el rumbo de la actual. Y hay muchas referencias a mi persona y, aunque no sea mi persona pura y real, esos monstruos tienen algo de gordillensis también… [Adrián de Paula. Foto: Hubertus von Hohenlohe]
